INTRODUCCION A LA ANATOMIA HUMANA

 

    Podemos decir sin miedo a equivocarnos que la historia de la anatomía empieza, casi, con la creación del hombre.

 

 

    La descripción más antigua de partes del cuerpo humano se debe a Hipócrates, magnificado en el mundo entero a partir de la glorificación de que le hicieron objeto los eruditos alejandrinos del siglo III a.C.

 

 

    Sin embargo, fue Galeno quien mejor supo aprovechar todos estos materiales anatómicos, sistematizando con maestría, no superada hasta entonces, el conocimiento de la anatomía. No obstante, la obra de Galeno adolece de claros defectos y grandes errores.

 

 

    Con Vesalio cambia totalmente el rumbo de la anatomía, que hasta ese momento había sido galénica. La gran aportación del autor se centra en la importancia que le concede al objeto de estudio de la anatomía, las disecciones humanas.

 

 

    Será pues, a partir de aquí, donde aparecerá toda una pléyade de autores que continuarán y perfeccionarán el conocimiento del cuerpo humano, ampliando a otros campos de la Biología el espíritu de la innovación vesaliana. Así, al añadirse nuevos métodos exploratorios, la anatomía no sólo será el estudio de la forma tal y como la encontramos en el cadáver, sino que su objetivo principal es el estudio de la "forma viviente".

 

 

 

 

     El comprender las formas del ser vivo durante su evolución, el cómo y el por qué de las mismas, y las leyes generales que las rigen, es el fin de la anatomía.